Ramón Muñoz de la Cuerva, presidente de la Asociación para la Promoción del Vino Campo de Calatrava y propietario de Bodegas Naranjo (Carrión de Calatrava), destaca nuevas iniciativas como las catas virtuales que están realizando en su bodega para atraer al turismo de interior y vender el Campo de Calatrava como destino seguro y con un gran potencial
P: ¿Qué cree que se necesita para reactivar en estos momentos el sector vitivinícola de la comarca?
R: Partimos de la base de que nos enfrentamos a una crisis de orden mundial, por lo que no tenemos sólo el problema con los productos que podemos sacar a nivel nacional, porque internacionalmente estamos igual, salvo en algunos países que hay posibilidades de exportación, pero son muy, muy reducidas. La cuestión es la incertidumbre, el no saber con exactitud cuándo regresaremos a una normalidad como la que teníamos, por lo tanto no sé cómo va a ser la reacción. A nivel nacional es muy complicado, porque si estamos reduciendo espacios de consumo por lo tanto reducimos consumo. Ahora mismo en el tema del vino la pandemia está agravando el problema que teníamos antes, porque tenemos mucho de excedente de vino en La Mancha, cuando estamos a las puertas de una campaña que se avecina con una gran cosecha. Si ya no hemos podido antes vender todo el producto y le sumamos la bajada tan importante que ha habido del consumo por la pandemia, nos encontramos en una situación delicada. Además, hay mucha incertidumbre alrededor del sector del turismo y eso, por ejemplo, repercute en el vino. Que no se celebren comuniones, bodas, grandes eventos, y que las terrazas no funcionen como antes repercute muchísimo en el consumo nacional.
P: ¿Cómo se puede ayudar a las empresas del sector que más están acusando las consecuencias de esta crisis? ¿Qué es lo que están haciendo en Bodegas Naranjo?
R: Hay que reinventarse. Por ejemplo, nosotros desde Bodegas Naranjo lo que estamos haciendo es impulsar proyectos que motiven a la gente, como las catas virtuales que estamos realizando, para ofrecer el consumo de vino en casa. Si no podemos ir al bar, pues vamos a promocionar el consumo de nuestros vinos en casa. Además de comer o cenar con vino, pues incentivar que se pueda disfrutar una tarde con una cata. Hemos contratado a un catador y a través de la plataforma zoom, llevamos nuestras marcas al hogar. Es una forma muy amena de dar a conocer nuestros productos porque lo acompañamos con música. Estamos haciendo cositas para reactivar al consumidor y a esa gente que no sabe dónde ir y cómo hacerlo. En las catas que están previstas incluiremos unos puntos de gastronomía para maridar tapas que se puedan hacer en casa con tal o cual vino. El objetivo es intentar que la gente se motive y que vuelva a consumir.
Además, siendo conscientes de la situación en que se encuentran tantas familias, destinaremos una parte de lo que cobramos por la cata al Banco de Alimentos, para colaborar con los que más lo necesitan. Si todos ponemos nuestro granito de arena, podemos ir avanzando hacia una normalidad, que no va a ser como lo que teníamos, porque esto nos ha cambiado todo, pero serán nuevas oportunidades.
P: El objetivo es vender el Campo de Calatrava como destino seguro en todos los sentidos
R: Sin lugar a dudas. Nuestras catas, por ejemplo, están basadas en el Campo de Calatrava, los tres vinos que promocionamos están certificados con ese marchamo identificativo de calidad. En nuestra página web tenemos abiertas las posibles visitas organizadas, con toda la seguridad, cuando se reactive todo. Estamos preparados para recibir grupos que no sean masivos, entre 10 ó 12 personas y así se podrá visitar una bodega que está en el Campo de Calatrava. Nosotros formamos parte de ese mundo del turismo interior que se va a potenciar este verano y ese es el que tenemos que defender, nuestro patrimonio y nuestros productos. Este año por desgracia, el último concierto que íbamos a hacer a finales de junio en Bodegas Naranjo pues no se va a poder hacer, pero se trata de que dentro que lo que nos permita Sanidad no parar, y echarnos para adelante, con respeto a la palabra contagio.
P: ¿Qué ha aprendido de esta crisis que pueda servir para el futuro?
R: Que sobretodo tenemos que ser lógicos y realistas. Que, como decía Sancho Panza, no podemos sacar los pies más allá de donde llegan las sabanas porque se nos enfrían, que tenemos que vivir lo que tenemos, ser realistas y disfrutar de nuestros productos, y por encima de todo valorar y potenciar nuestro comercio, nuestro patrimonio, lo nuestro, nuestro entorno.
P: ¿Cree que la comarca necesita acciones encaminadas a la digitalización?
R: Sí, es una de las cosas de las que me he dado cuenta. No me cabe duda de que las nuevas tecnologías nos ayudan mucho en el trabajo, nos quitan tiempo, pero son unas aliadas. Todas estas catas que hacemos en Bodegas Naranjo si no fuera por las nuevas tecnologías no las podríamos hacer y ahí las tenemos. El teletrabajo que se ha realizado desde las empresas que puedan hacerlo es beneficioso para el consumo y contra la contaminación. Nos está echando una mano grande y tenemos que aprender de esto de cara al futuro.